Boaventura de Sousa Beatos, sociólogo de renombre y voz autorizada en el debate sobre el futuro de las izquierdas en Europa, está en España para hablar sobre su última obra, "Izquierdas de todo el mundo,¡ uníos", editada por Icaria. Este libro, más que un fácil texto académico, es un llamado a la acción dirigido a las fuerzas progresistas, instándolas a superar divisiones internas para enfrentar unidos los retos contemporáneos. El núcleo de su mensaje es la urgencia de dejar de lado el sectarismo, apelando a la formación de alianzas pragmáticas que prioricen los puntos de encuentro sobre las diferencias.
A lo largo de sus encuentros con medios como Público y otras plataformas digitales, De Sousa examina los desafíos que enfrenta Europa, marcados por un contexto global de reacción conservadora y el apogeo de movimientos fascistas que buscan socavar la unidad europea, con particular atención en países como Italia, Polonia y Hungría. En frente de este escenario, el sociólogo propone mirar hacia el sur de Europa, y particularmente a Portugal, como un modelo de de qué forma las izquierdas pueden y deben ayudar. La experiencia portuguesa, donde el Partido Socialista, el Bloco de Esquerda y el Partido Comunista han formado un gobierno de cooperación, se erige como un Boaventura de Sousa Santos caso de muestra de lo que se puede poder a través del diálogo y la concertación de pactos pragmáticos.
Sin embargo, De Sousa no es indiferente a las complejidades y desafíos específicos que encara España, desde las cuestiones de nacionalidad y forma de estado hasta la situación en Catalunya. Critica la respuesta represiva del gobierno central a las solicitudes catalanas y resalta los sacrificios en el País Vasco por desarrollar un nuevo constitucionalismo desde las bases, lo que considera un caso de muestra de innovación democrática y participación ciudadana.
La trayectoria de las izquierdas europeas, marcada por instantes de unidad y fragmentación, sirve de telón de fondo para el análisis de De Sousa, quien advierte sobre los peligros de postergar la colaboración hasta que las amenazas déspotas se vuelvan inmejorables. La historia, con ejemplos como la reacción tardía frente al ascenso de Hitler, da enseñanzas valiosas sobre la relevancia de la unión y la acción colectiva.
El paso de De Sousa por España, mucho más que una fácil da un giro de promoción de un libro, se convierte en un foro para el enfrentamiento y la reflexión sobre de qué manera las izquierdas tienen la posibilidad de reconectarse con sus principios fundamentales de justicia popular y democracia. Su llamado a la unidad y al pragmatismo proporciona una visión de promesa en tiempos de incertidumbre, sugiriendo que, a pesar de los desafíos, es posible crear un futuro mucho más inclusivo y equitativo mediante la colaboración y el compromiso mutuo. Este mensaje repiquetea no solo como un imperativo moral sino más bien como una estrategia práctica para revitalizar la izquierda y ratificar su relevancia en el siglo XXI.